Hace 30 años, se inclinó por una profesión dura, sacrificada, llena de muchos obstáculos, pero también de sueños cumplidos y los que tiene por cumplir. Él es Gustavo Julio Alfaro, nacido hace 58 años en la Provincia de Santa Fe – Argentina, siempre soñó con jugar a la pelota (nunca lo hizo en primera división), pero jamás renunció a lo que era, es y será su pasión: el fútbol, que desde su debut como DT en 1992 se ha dedicado a enseñar a sus pupilos sobre estrategias – tácticas, pero sobre todo a inculcarles el poder de soñar para conseguir lo que uno se proponga, como señala una de sus frases mencionadas en una entrevista al medio Coaches Voices. “Siempre digo a mis jugadores –también a mis hijas- el valor de perseguir los sueños”.
Y así empieza la historia, que vale la pena repasar en esos difíciles tiempos que vive la sociedad, de un Director Técnico quien llegó a Ecuador hace menos de un año, pero con sus conocimientos; capacidad y sobre todo el espíritu que pone y trasmite a más de uno de sus jugadores, invita a soñar a los ecuatorianos con llegar al cuarto mundial y para Gustavo Alfaro su primera experiencia en el banquillo técnico en una copa de mundo.
Te invitamos a qué conozcas más a fondo al profe Gustavo Alfaro; sus inicios futbolísticos, sus conceptos tácticos y técnicos, la diferencia entre dirigir a un club y su primera vez a una Selección y cuán importante es trabajar para cumplir los sueños que uno se proponga.
Cómo nació la pasión por el fútbol: A los 28 años, luego de llegar a un acuerdo con sus padres, entre estudiar la carrera de Ingeniera Química y dedicarse al fútbol. Alfaro se inclinó por la pelota. “Déjenme hacer esto que es lo que soñé toda mi vida. Porque Ingeniero puedo ser a los 40, pero futbolista no”, les dije. Y ellos (mis padres) aceptaron”.
Su gran anhelo estar en la cancha detrás de una pelota y luego en el banquillo: “Sentí que la pasión por la Ingeniería se había muerto, y había nacido mi verdadera pasión, que era la que tenía de chico cuando soñaba con los domingos del fútbol estar en un club de primera división. Como no lo había alcanzado como jugador, sí quería hacerlo como entrenador de un equipo de Primera”
Su primer club como jugador profesional: Atlético Rafaela de la segunda categoría del fútbol argentino.
Los sueños del profe Alfaro siempre fueron apuntar alto. “Yo quiero pelear un campeonato, copas internacionales”.
Y el primer sueño lo consiguió con el Arsenal de Sarandí: “Yo quiero ir a Japón”. Entonces me dije a mí mismo: “este está más loco que yo”. Pero bueno, la cuestión es que Arsenal terminó yendo a Japón (final de la Copa Japonesa-Sudamericana) después de ganar la Copa Sudamericana en 2007.
Su llegada a Boca JRS, uno de sus mayores logros en su carrera como entrenador. Siempre digo que el recorrido de un entrenador es como una botella. Si superas los objetivos, como ocurrió con Arsenal, subes hasta llegar a Boca Juniors, al cuello de la botella. Un momento decisivo, porque si consigues superar ese cuello de botella, es como que se abre un mundo entero de posibilidades”
Sueño cumplido de estar al frente de una Selección, pero va por más. Después de mucho “remar”, viendo y comentando a las distintas selecciones detrás de un micrófono y de una pantalla (Gustavo Alfaro estuvo en 4 copas mundiales como comentarista deportivo en Colombia), recibió el llamado al combinado ecuatoriano y hasta el momento arrancó de excelente manera el sueño de llegar a su primer mundial.
“Yo he estado en cuatro Mundiales seguidos, desde Alemania 2006 a Rusia 2018, trabajando para una televisión de Colombia. Antes de cada partido, miraba abajo desde la posición de la cabina de televisión y me fijaba en los seleccionadores. No con envidia, porque ese es un sentimiento de confrontación, pero sí con deseo de algún día poder estar yo ahí”
Lo tiene claro como es dirigir una Selección: “En una Selección, el jugador llega como llega y en relación a eso tienes que adaptarlo y adaptarte tú. Y más las eliminatorias de Sudamérica, muy agresivas en ese aspecto porque es muy disímil: los escenarios, las distancias, las geografías, los climas. Los tiempos son perentorios y no hay margen, muchas veces se trabaja sobre la marcha.
“En la Selección hay mucho más tiempo para entrar en los detalles y eso es lo que tiene a favor el hecho de ser un seleccionador y no un entrenador”
Qué significa dirigir una Selección. “Le transferimos la ilusión de un país. Pero con la transferencia de la ilusión de un país, con todo lo que moviliza el fútbol, te están transfiriendo no solo una ilusión, sino también una responsabilidad enorme. Uno solo no puede lograr las cosas, menos en un trabajo en equipo y menos en el fútbol. Como entrenadores sabemos que muchas veces cuando tenemos la suerte de tener éxito se lo debemos al esfuerzo de un montón de gente”
“De las cabinas de prensa al banquillo técnico: “Mi misión en los Mundiales (de comentarista deportivo), más allá de comentar partidos y circunstancias del torneo, era observar las decisiones y resoluciones de los entrenadores. Ponerme en su cabeza para ver por qué planteaban; por qué tomaban determinadas decisiones, la relación con los jugadores. Eso me daba una perspectiva mucho más acabada de lo que podía ser el rol de seleccionador. Un poco eso fue lo que traté de aprovechar en todo este tiempo” (de comentarista deportivo).
Y el sueño de dirigir un mundial lo quiere lograr con la Tricolor. “Mi meta es llegar a Qatar 2022”. ¿Lo logrará? Solo el tiempo, sus estrategias, el entendimiento con sus pupilos lo dirán, porque si es cuestión de soñar, el profe Gustavo Alfaro tiene sus sueños muy claros y lo aplica tanto en su vida personal, como profesional. “Siempre digo a mis jugadores –también a mis hijas- el valor de perseguir los sueños” ….
Fuente: Declaraciones tomadas del sitio web internacional: “The Coaches Voices”. https://es.coachesvoice.com/qatar-2022-gustavo-alfaro-ecuador/